Cargando...El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, ha participado hoy en una mesa redonda sobre eficiencia sanitaria organizada por el diario “La Razón”. Junto a otros representantes del sector sanitario español, Echániz ha señalado que, tanto las reformas y los ajustes emprendidos en la sanidad regional como los que se están abordando en toda España, buscan priorizar la eficiencia como criterio básico de la gestión de un sistema sanitario llamado a ser viable y sostenible.
La experiencia pionera del plan desarrollado por la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales en Castilla-La Mancha ha hecho que Echániz haya liderado este encuentro, quien ha enfatizado que la crisis social y económica que vivimos en España “ha logrado algo esperanzador, pues por primera vez el Estado y las Comunidades Autónomas están tomando medidas para reformar el Sistema Nacional de Salud: los propios de un sistema de más de 30 años, y los derivados de los graves problemas de gestión en los últimos años, como se pone en evidencia en Castilla-La Mancha”.
En su opinión, “con valentía y decisión se ha roto la inercia. Después de años en los que faltó voluntad política, ahora se están tomando medidas encaminadas a lograr la máxima eficiencia de un sistema sanitario llamado a ser viable y sostenible”.
Con la responsabilidad de cumplir los objetivos de déficit, Echániz ha recordado que el Gobierno de Castilla-La Mancha está poniendo la sanidad y los servicios sociales “en la senda de la eficiencia, que antes era una opción, pero que ahora es una necesidad”. En este sentido, ha remarcado que “será muy difícil que la sanidad española gane peso relativo con respecto al PIB en los próximos años, por eso estamos poniendo las bases de un modelo sanitario eficiente, que sea capaz de hacer más con menos, y que sepa maximizar la calidad y garantizar los servicios sociales básicos y el valor añadido de las inversiones adicionales”.
Echániz ha considerado que el contexto sanitario regional y nacional “demuestra que estamos en el momento de los buenos gestores. La política sanitaria debe estar, pues, asentada sobre los pilares de la valentía, el coraje y la determinación, para excluir lo que no aporta valor, para eliminar lo que sobra, y para evaluar, con criterios técnicos, las nuevas fórmulas de gestión. Es el momento de las reformas profundas”, ha añadido.
Asimismo, ha criticado la gestión socialista de los años precedentes y ha destacado la importancia del programa de pago a proveedores, que servirá para saldar las deudas de años anteriores. En su opinión, “a partir de ahora, en la sanidad de Castilla-La Mancha no va a haber nunca más déficit. La sanidad lleva años financiándose con impuestos y con deuda, pero ni esta región ni el Gobierno de España se van a poder permitir ya más deslizamientos presupuestarios. Sólo si somos capaces de resolver el drama del desempleo, podremos contar con más recursos para la sanidad”, ha subrayado.
A juicio del consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha, “han cambiado las reglas del juego. Tenemos la financiación sanitaria que tenemos, y gestionar con esa realidad será nuestra obligación”. También ha recordado que, precisamente, el Plan de Garantía de los Servicios Sociales Básicos de Castilla-La Mancha y los Presupuestos de 2012 recogen esta teoría de forma práctica, “poniendo la eficiencia y la sostenibilidad del sistema sanitario regional en términos numéricos, consolidará las sinergias y ahorrará evitando las bolsas de ineficiencia que persistían hasta ahora en nuestra sanidad autonómica”. En ese sentido, ha destacado la puesta en marcha de la central de compras, de la reordenación de los procesos logísticos, de la adecuación de las infraestructuras a la realidad de la población y otros procesos de redimensionamiento que se están llevando a cabo en la sanidad castellano-manchega para consolidar y garantizar los servicios sociales básicos.
COLABORACIÓN PÚBLICO-PRIVADA
Durante la mesa redonda, la mayoría de los participantes han destacado la oportunidad de seguir desarrollando un modelo mixto de gestión sanitaria que tenga en cuenta el valor que aporta la sanidad privada. En este sentido, los participantes han recomendado la extensión de las fórmulas de colaboración público privada, tal y como se está proponiendo desde la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha. Asimismo, han coincidido en la necesidad de seguir proponiendo ajustes y reformas para racionalizar el gasto y salvaguardar, para siempre, la viabilidad del Sistema Nacional de Salud y del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha.
Junto al consejero castellano manchego han participado el responsable de Sanidad de la Comunidad Valencia, Luis Rosado; el portavoz de Sanidad del PSOE en el Congreso de los Diputados, José Martínez Olmos; el secretario de Salud Pública de la Consejería de Salud de Cataluña, Francesc Sancho; la presidenta del Consejo General de Colegios de Enfermería, Carmen Peña; el presidente del Consejo General de Enfermería, Máximo González Jurado; el presidente de Capio, Víctor Madera; el vicepresidente de la Federación Europea de Médicos Asalariados, Carlos Amaya, y el director de Relaciones con las Comunidades Autónomas de Farmaindustria, José Ramón Yagüe.
