Cargando...La consejera de Agricultura de Castilla-La Mancha, María Luisa Soriano, ha avanzado hoy que su departamento firmará próximamente un acuerdo para el control de la contaminación y la protección del medio subterráneo con los operadores y distribuidores de productos petrolíferos de Castilla-La Mancha.
En declaraciones a los medios de comunicación antes de la clausura de la “Jornada Técnica sobre la Nueva Ley de Residuos y Suelos Contaminados”, organizada por la Federación Empresarial Toledana (FEDETO) y la empresa CESPA, Soriano ha abogado por hacer compatible “el progreso económico y social con el respeto al medio ambiente”.
En esta línea se sitúa el pacto que rubricarán la Junta y las gasolineras, cuyo objetivo final es diseñar e implantar una red de control que permita conocer los riesgos medioambientales asociados a cada emplazamiento, actuando de forma temprana para su detección, minimización o eliminación.
Por otro lado, la consejera ha explicado que Agricultura trabaja intensamente junto a las industrias en el control del cumplimiento de la normativa medioambiental a través del Plan de Inspección Medioambiental de Castilla-La Mancha 2012-2018.
En dicho plan se han simplificado los trámites, gracias a la puesta en marcha de la ‘visita única’, en la que se coordinan los inspectores de las diferentes materias para evitar que una misma instalación reciba varias visitas por separado, lo que incide, a juicio de Soriano, “en esa apuesta continua por la simplificación administrativa que caracteriza al Gobierno de Dolores Cospedal”, ha asegurado María Luisa Soriano.
Asimismo, la titular de Agricultura ha detallado que el plan ha introducido un concepto novedoso, como es la verificación que los propios empresarios podrán hacer mediante un autochequeo del cumplimiento de las condiciones de su instalación.
En este sentido, María Luisa Soriano ha anunciado también otro próximo acuerdo con la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha (CECAM) para esta verificación del cumplimiento medioambiental de las instalaciones de sus asociados.
“Se trata de simplificar la labor de los empresarios, de no complicarles la vida”, ha señalado, aunque ha recalcado que “no por ello la Junta renuncia en ningún caso a mantener un escrupuloso seguimiento para asegurarse de que se cumplen las normas”.
