Con motivo del Día Mundial de las Abejas, el IES Juan Bosco de Alcázar de San Juan ha presentado el proyecto ‘Apis Ibérica’, una iniciativa de innovación educativa que pone el foco en la protección y el estudio de la abeja ibérica, especie en peligro de extinción y esencial para la biodiversidad y la seguridad alimentaria. Durante la jornada celebrada este 20 de mayo, el concejal de Educación, Antonio Moreno, y el concejal de Medio Ambiente, Pedro Noblejas, han asistido al centro para conocer de primera mano el trabajo que se está desarrollando, junto al director del IES Juan Bosco, Manuel Acera.
La actividad ha incluido una charla divulgativa para el alumnado sobre el papel fundamental de las abejas en los ecosistemas, una experiencia sensorial de maridaje de distintos tipos de miel con productos gastronómicos y una exposición apícola abierta al público en el pasillo central del instituto, que permanecerá disponible hasta el final del curso escolar.
‘Apis Ibérica’ es un proyecto financiado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional, y coordinado desde el IES Juan Bosco. En él participan otros dos centros educativos: el IES Francisco García Pavón de Tomelloso, encargado de la parte de robótica, y el centro Trinitarias de Salamanca, que desarrolla el área informática. La iniciativa, de carácter multidisciplinar, une a docentes de diversas áreas como científico-tecnológica, historia, matemáticas, artes plásticas, administración en torno a una propuesta común: sensibilizar a la comunidad educativa sobre la importancia de conservar las poblaciones de la abeja ibérica.
El concejal de Medio Ambiente, Pedro Noblejas, ha trasladado el respaldo del Ayuntamiento de Alcázar de San Juan a esta iniciativa puesta en marcha por el centro, destacando su valor educativo y su impacto en la concienciación medioambiental. A través de ‘Apis Ibérica’, «se pone en valor la importancia de los polinizadores no solo en la producción de alimentos —de los cuales el 75% depende de ellos— sino también en su dimensión cultural, ecológica y evolutiva».
Entre las acciones llevadas a cabo, destaca el desarrollo de una colmena inteligente capaz de registrar datos como temperatura, humedad, niveles de CO2 y peso. Esta tecnología permite analizar las condiciones de vida de las abejas y detectar posibles amenazas como parásitos o cambios en el ambiente. Toda esta información es recopilada mediante sensores diseñados por el alumnado de Formación Profesional y enviada a la nube para su seguimiento en remoto, reduciendo la necesidad de visitas físicas a las colmenas.
Otra línea de trabajo del proyecto es la creación de un aula exterior, concebida como un espacio de aprendizaje conectado con la naturaleza. Este espacio está siendo diseñado bajo criterios de sostenibilidad, incluyendo elementos de autosuficiencia energética, recogida de agua, riego automatizado y monitorización ambiental. Se ha plantado vegetación autóctona para atraer a los polinizadores locales, convirtiendo el aula en un ecosistema vivo que permite al alumnado observar de forma directa los efectos de la biodiversidad.
La participación del alumnado es amplia y diversa: estudiantes de ESO, ciclos formativos de grado medio y superior están implicados en todas las fases del proyecto, desde la investigación hasta el diseño tecnológico, pasando por la producción de materiales expositivos y actividades de divulgación. El centro ha apostado por integrar conocimientos de múltiples disciplinas para abordar un reto medioambiental desde la innovación.