Cargando...Eurostat ha publicado recientemente datos actualizados de la estadística que refleja la proporción de jóvenes que ni estudian ni trabajan en la Unión Europea. Unos datos que reflejan que España ha conseguido un mínimo histórico, reduciendo la tasa hasta el 12,3% en 2023, cuatro décimas menos que el año anterior e inferior a los datos que se registraron durante los años de la crisis inmobiliaria. Unos datos que reflejan el resultado de las medidas llevadas a cabo por el Gobierno central en materia laboral y educativa.
En la última década, esta tasa ha caído más de 10 puntos porcentuales, un descenso mayor que la tasa media de la UE que ha descendido menos de 5 puntos. A esto se suma, además, que el descenso que ha experimentado en nuestro país ha sido ininterrumpido, con la única excepción del año 2020, como consecuencia de la pandemia. Se ha pasado de una diferencia de 6,4 puntos porcentuales en 2013 a 1,1 puntos en 2023, igualando el registro de Francia (en 2013 la diferencia con el país vecino era de 8,7 puntos).
En el conjunto de países de la OCDE, de media, el 52% de los jóvenes sigue estudiando, un 31% no estudia pero sí trabaja y el 14% no hace ni lo uno, ni lo otro.
Desde el PSOE valoramos que este buen resultado no es casual, que es una muestra más del efecto que están teniendo las políticas y medidas llevadas a cabo por el Gobierno español, especialmente en el ámbito laboral y educativo.
Medidas como la reforma laboral, que ha beneficiado especialmente a los jóvenes, que eran quienes sufrían en mayor proporción la temporalidad. Según datos de la EPA, entre los asalariados de 16 a 29 años, hoy tienen contrato temporal el 33,7% frente al 55,6% previo a la aprobación de la reforma. En el global de la población trabajadora, esta variable ha pasado del 25,6% al 15,7%. Gracias a la reforma laboral, la tasa de paro joven también ha experimentado una notable reducción.
Otro factor que ha influido en la mejora de la tasa de los jóvenes que ni estudian ni trabajan ha sido la inversión en educación, propiciando la reducción de la tasa de abandono escolar temprano. Los datos sitúan esta tasa en 2023, referida a los jóvenes entre 18 y 24 años que no han completado la segunda etapa de Educación Secundaria, en un 13,6%, lo que supone un descenso de tres décimas respecto al año anterior y comparada con hace una década, el porcentaje de abandono ha bajado 10 puntos. Se ha pasado del 23,6% en 2013 al 13,6% en 2023. Con respecto al resto de la UE, la distancia se ha reducido, pasando de los 11,8 puntos a 4.
Uno de los factores que han influido en esta reducción es el fortalecimiento del sistema de FP, iniciada en 2018. Un sistema que promueve garantizar la empleabilidad de jóvenes y trabajadores y el éxito de las empresas. El Gobierno socialista ha realizado una inversión de más de 6.500 millones de euros entre 2021 y 2024 para impulsarlo (en 2018 la inversión fue de 187,5 millones de euros) superando la cifra histórica de más de un millón de estudiantes de FP en el curso 2023- 2024.
Importante también el esfuerzo y la inversión realizada en becas, que también ha contribuido a reducir la tasa de jóvenes que ni estudian ni trabajan. Para el próximo curso 2024-2025 la dotación es becas es histórica, con una inversión de 2.535 millones de euros; un incremento de 15 millones más que el curso anterior y un crecimiento del 72% desde el año 2018 que beneficiará a más de un millón de estudiantes.
En definitiva, la reducción de la tasa de jóvenes españoles que ni estudian ni trabajan es un claro ejemplo de los efectos positivos de las políticas socialistas que, desde el Gobierno de España, se están llevando a cabo.
