Visita institucional del presidente de la entidad financiera, Javier López, al presidente de la Diputación abulense, Jesús Manuel Sánchez Cabrera.
En su primera visita institucional a la Diputación de Ávila tras su elección como presidente de Caja Rural Castilla-La Mancha el pasado 28 de octubre, López estuvo acompañado por el director de Relaciones Institucionales de la entidad, Miguel Ángel Escalante, el director territorial en Ávila, Sebastián Rodríguez, y la directora de la oficina de Ávila, Susana Ayres, entre otros.
El presidente de la Caja y el de la Diputación pusieron de manifiesto su objetivo común de generar recursos que garanticen el desarrollo sostenible de la provincia.
Una entidad con valores
Javier López recordó que Caja Rural Castilla-La Mancha lleva en Ávila desde 1997, cuando abrió su primera oficina en Candeleda.
En este momento cuenta con 20 oficinas en la provincia, dando un servicio cercano y de calidad a sus socios y clientes.
Según dijo, “somos una cooperativa de crédito saneada, muy pegada a la tierra y comprometida con su progreso. Nuestros clientes saben que pueden dormir tranquilos si tienen sus ahorros en Caja Rural Castilla-La Mancha”.
Javier López destacó que mientras el resto del sector financiero ha emprendido un duro proceso de ajuste de oficinas y plantilla, Caja Rural Castilla-La Mancha ha ido a contracorriente, iniciando a finales de 2011 un exitoso Plan de Expansión por el que ha abierto 178 nuevas oficinas en Castilla-La Mancha, Madrid y Ávila, duplicando su red comercial y generando numerosos puestos de trabajo.
Fruto de la confianza generada en todo su ámbito de actuación, subrayó los 33.525 nuevos clientes ganados en 2016.
Por su parte, el presidente de la Diputación agradeció la visita de Javier López y valoró la “seguridad, solvencia y responsabilidad” de esta cooperativa de crédito y su apoyo a los sectores productivos de Ávila.