Ambas manifiestan que es la decisión más difícil y dolorosa que han tenido que tomar, pero la diferencia en los criterios de organización y participación aplicados en el seno del grupo municipal ha provocado una ruptura irreversible entre sus miembros, siendo inaceptable la situación a nivel político y personal.
Los intentos continuados por parte de estas dos concejalas de establecer valores democráticos internos y conciliar posturas, han resultado del todo inútiles ante los criterios arbitrarios del Portavoz del Grupo Municipal Socialista.
Picazo y Navarrón lamentan profundamente haberse visto obligadas a llegar a esta situación, ya que no se trata de divergencias con el ideario socialista, sino con la manera de “entender la política” de los dirigentes locales del PSOE. Declaran no sentirse representadas por quienes en este momento están al frente del partido.
De igual manera, solicitan respeto ante esta decisión tan traumática para ellas, al tiempo que, como Concejalas no adscritas, manifiestan su intención de seguir trabajando por y para los vecinos de Socuéllamos hasta el final de la legislatura, atendiendo así al compromiso que adquirieron con ellos en las últimas elecciones municipales.