Arropado por cientos de vecinos, el patrón de Campo de Criptana, el Santísimo Cristo de Villajos, volvía a su Santuario tras un mes de estancia en la localidad.
Una vuelta a casa que ni la DANA pudo impedir ante el fervor y la emoción de los criptanenses que quisieron acompañar a su patrón hasta su ermita.
De esta forma y tras la celebración de los actos religiosos en la Parroquia de la Asunción de Nuestra Señora, la imagen del patrón salía en procesión hasta las llamadas ‘portás’ junto a las damas de las fiestas, las juntas directivas de las hermandades patronales, la corporación municipal, autoridades eclesiásticas y la música de la Banda Filarmónica Beethoven.
Tras un breve receso, y ya acompañado por la Banda Cristo de la Elevación, el Cristo de Villajos, a paso ligero, tomaba el camino hacia el Santuario con la tradicional parada en la ermita de San Isidro.
La lluvia hacia acto de presencia a falta de un kilómetro para la llegada, lo cual no impidió que anderos y vecinos arropasen aún más a su patrón que entraba con una nueva marcha, ‘Como Yo os he amado’, compuesta por el músico y compositor criptanense, Juan Gabriel Amores, e interpretada por la Banda Cristo de la Elevación.
Con estos sones y el aplauso de su pueblo, el Santísimo Cristo de Villajos descansa ya en su Santuario a la espera de la llegada del próximo mes de agosto, cuando de nuevo vuelva a la Villa Molinera para presidir las fiestas patronales.
Llevada Cristo de Villajos