¡FELICIDADES! Gritamos cuando alguien cumple años. Le llamamos, le enviamos un mensaje, le compramos un regalo y si es un familiar cercano, nos reunimos en familia para celebrar su cumpleaños o su aniversario. Incluso, si tenemos fe, damos gracias a Dios por su vida.
Hay tradición de que un hijo se llame como su padre o incluso como se llamaba su abuelo. Si es una hija, puede llamarse como su madre o como su abuela. Es una forma de que los recuerdos continúen a lo largo de la vida. Deseamos que sus huellas sigan y permanezcan en la vida a través del nombre.
Como somos de carne y hueso, son reacciones propias de la psicología humana y de nuestra afectividad. En lo tocante a nuestra religiosidad obramos de igual manera: mi hija se llamará María, quiero que el nombre bendito de la Virgen esté grabado para siempre en toda su persona.
En el 800 aniversario de la aparición de la Virgen de Criptana, recordamos las huellas que la historia ha dejado grabada no solo en los corazones, que es lo más importante, sino en las calles, en la ermita y en diferentes edificios o instituciones. Es fruto del cariño manifestado a la Madre de Dios a lo largo de la historia. ¡Qué bonito es contemplar las huellas del amor tierno a la Virgen!
¿Os habéis preguntado alguna vez por qué los habitantes de Campo de Criptana aman tanto a Dios, aman tanto a su madre? ¿Por qué hay respuesta a las llamadas de Dios a través de la Iglesia o de la parroquia? ¿Por qué hay tantas personas buenas en nuestro pueblo? ¿Por qué Dios nos bendice con tanta magnanimidad?
Yo siempre me he respondido de la misma manera: Dios nos bendijo a través de las apariciones de la Virgen, del voto, del patronazgo de la Virgen de Criptana. Es la Madre de Dios que extiende su manto protector y ha hecho de Campo de Criptana tierra de gracia, tierra de Dios ¿Lo creéis también vosotros?
Somos eslabones de la cadena de la historia en este patronazgo de la Virgen y ojalá no se rompa esta cadena por cualquiera de los eslabones que somos nosotros.
Para María somos todos sus hijos y para ella no estamos clasificados en derechas, izquierdas o de centro. Para ella los latidos de nuestros corazones criptanenses tienen el mismo sonido, laten con la misma música. Nuestras luchas, nuestras lágrimas, nuestros sufrimientos le duelen igual y nuestras alegrías son de sus hijos queridos de Campo de Criptana. Y todo esto desde toda la eternidad, pero especialmente desde hace 800 años.
Bendita Madre que ha derramado durante tantos años sus gracias sobre nuestro pueblo. Sigamos honrándola, más si cabe cada día, y sigamos poniendo su nombre bendito a nuestras hijas, a los colegios, a los negocios, a los polideportivos, a las cooperativas y a todo tipo de agrupación o institución porque será señal de que la amamos con amor histórico, pero, sobre todo, imitemos su amor a Jesús, su sencillez, su entrega generosa, su entereza, su servicio, su pobreza y humildad. Esa será la mejor manera de honrarla.
Hemos acabado un año más institucional repleto de actos extraordinarios conmemorando el 475 aniversario del voto a nuestra Patrona y desde aquí quiero dar las gracias de todo corazón a todas las personas, asociaciones e instituciones que con su trabajo desinteresado han puesto su granito de arena para hacer más grande la figura y devoción de nuestra madre y como no a mi Junta directiva que han trabajado incansablemente porque sin ellos nada de esto se había realizado. GRACIAS A TODOS.
Y sin parar comenzamos otro ilusionante año conmemorando el DCCC Aniversario de la aparición de nuestra Patrona donde el programa de actos se confeccionará en torno a esta efeméride con la fuerza y tesón que caracteriza a esta Junta Directiva, por lo que os animamos a participar en todos los actos culturales y religiosos que se programen pues, sólo así, podremos sumar años y años de devoción a nuestra Madre y Patrona.
Feliz Pascua de Resurrección a todos.
Recibid un afectuoso abrazo.
Jesús Delgado Ortiz
Presidente de la Hermandad