La Federación de Baloncesto de Castilla-La Mancha y los representantes de los clubes regionales se reunieron en Alcázar de San Juan, para solucionar esta situación tan insostenible, a la que ha derivado el baloncesto regional.
El presidente de la FCBLM, Ramón Granados, se ha comprometido a abonar de su propio bolsillo, todas las deudas de la Federación de Baloncesto de Castilla-La Mancha con los árbitros, en un plazo máximo de cuatro meses. Este compromiso ya ha sido anunciado en anteriores ocasiones, incumpliendose por la parte institucional. Además, admitieron que la deuda real, y la que denuncian los colegiados, difieren en las cifras presentadas.
Los clubes regionales seguirán luchando por conseguir más trasparencia en la gestión económica. El 21 de marzo, se celebrará la Asamblea General de la FBCLM para tratar este tema, aprobar cuentas y revisar los estatutos.