Esta estrategia, denominada ‘Estudio y actuaciones para la salvaguarda y activación del Patrimonio de la Sierra de los Molinos de Campo de Criptana y su integración en el paisaje”, ha sido conocida por investigadores, profesores y universitarios relacionados con la protección del Patrimonio y la Arquitectura.
Estos estudios y actuaciones han tenido una gran acogida en este foro nacional, ya que además de los molinos de viento y el Barrio del Albaicín, por vez primera han protegido el paisaje entendido también como elemento cultural.
El inicio de estos estudios se remontan al año 2005, gracias al convenio firmado por el Ayuntamiento y la Fundación Caja Madrid, que además de conllevar la restauración de los molinos de viento que inspiraron a Cervantes para narrar la aventura contra los gigantes, también protege las cuencas visuales, para que los molinos de viento puedan percibirse en todo su esplendor desde dentro y fuera del casco urbano.
En este foro, Lucas-Torres también ha valorado la importancia del Plan Nacional de Arquitectura Tradicional y, en el caso de Castilla-La Mancha, ha destacado la nueva Ley de Patrimonio Cultural sacada adelante por el Gobierno Regional y sobre todo la iniciativa presentada por la presidenta Cospedal para la declaración como Bien de Interés Cultural de los Escenarios del Quijote en nuestra región.