Con el lema “Ayuda a la Iglesia, ganamos todos” se ha pedido la colaboración de creyentes, no creyentes que ven de forma positiva la labor que desarrolla la Iglesia, una institución que “ven más cercana”, y de todos aquellos que quieran colaborar con esta causa que no les supone ningún gasto ni ningún impuesto más, simplemente permite que el Estado revierta en la Iglesia el 0,7% de las declaraciones que hayan marcado esta casilla y esta cantidad supone el 25% de la financiación de la institución religiosa.
Así lo ha indicado en rueda de prensa el párroco de Santa María La Mayor, Javier Quevedo en representación de la Iglesia de Alcázar de San Juan y del Arciprestazgo Mancha Norte. Sus primeras palabras han sido de agradecimiento a los contribuyentes que marcaron la x en el ejercicio pasado, ya que han aumentado en un 0,96% a nivel nacional, mientras que en la provincia de Ciudad Real ese gesto lo tuvieron un 1,44% más de declarantes, si bien se ha recaudado menos dinero. Esto supone que a nivel nacional han puesto la x un 35,39% de los contribuyentes y en Ciudad Real lo han hecho el 55,57%.
El lema elegido este año de “Ayuda a la Iglesia, ganamos todos” da cuenta de las funciones que realiza que se centran en la atención de ancianos en asilos, en las casas con la ayuda de voluntarios, en el acompañamiento de familias, la labor de Cáritas con el Centro Samaría en Alcázar o los proyectos para el desarrollo que realiza Manos Unidas y otras organizaciones. No sólo cumple con una función caritativa y social con los pobres y los más desfavorecidos, los miembros de la Iglesia también hacen acompañamiento en los bautizos, la catequesis con más de mil niños a los que no sólo se les imparten conocimientos religiosos, sino que también se les da una educación en valores, hay cursos de preparación al matrimonio y “qué sería Alcázar de San Juan sin los colegios de Los Trinitarios, Las Trinitarias o La Sagrada Familia”. La comunidad educativa que existe en esta ciudad formada por 5 sacerdotes, más dos jubilados, 10 religiosos y varios conventos de religiosas, se encargan de conducir esta labor junto a los voluntarios.
Por otro lado, “también tenemos el mandato de cuidar el patrimonio” y desde este punto de vista Quevedo ha animado a colaborar igualmente poniendo la x en la declaración de la renta tanto a favor de la Iglesia, sin dejar de ponerla por ello en la casilla de fines sociales. Un porcentaje de este apartado también se destina a Cáritas, que en Alcázar de San Juan atiende a personas en situaciones complicadas por el descenso en sus ingresos. Uno de los voluntarios de esta organización, Jesús Guzmán, ha explicado el aumento de demanda de recursos de primera necesidad que ha experimentado Cáritas en esta ciudad, tanto de personas inmigrantes como de naturales del municipio.
Por último, Quevedo ha señalado que en la Iglesia “el dinero se trata con austeridad y con poco se hace mucho”.