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En este curso que se desarrolla durante esta mañana, profesionales del mundo de la prevención laboral van a ilustrar a los asistentes, empresarios en su mayoría, sobre un “ámbito tan importante y tan prioritario para el Gobierno de Castilla-La Mancha como es la prevención laboral en el trabajo”, así lo ha explicado en declaraciones previas al comienzo del curso, el alcalde de Alcázar de San Juan, Diego Ortega.
Organizado por Prevenmancha con financiación del programa “Territorio Innovador”, este curso “vuelve a situar a Alcázar en centro de referencia en formación en riesgos laborales”. Ortega ha deseado que esta jornada “sea provechosa para que los empresarios puedan sacar conclusiones para beneficio de su empresa” y para conseguir el objetivo de “contribuir en la salud laboral de las empresas”.
En el acto de inauguración ha estado presente la directora general de Relaciones laborales y Seguridad laboral de la Consejería de Empleo de Castilla-La Mancha, María del Sagrario Gómez de Vivar, quien aunque ha reconocido que “los índices siniestralidad son buenos en el último trimestre” en Castilla-La Mancha, “no hay que bajar la guardia y trabajar en el fomento y divulgación de las buenas prácticas para que las condiciones de trabajo sean lo mejor posible y bajar esos índices, porque aunque los datos son esperanzadores no cejaremos hasta conseguir el dato de accidentes 0 en esta región”.
La tasa de siniestralidad en este tercer trimestre comparado con el mismo período del año anterior, ha bajado un 23%, “un dato esperanzador y bueno, pero no vamos a bajar la guardia y haremos lo posible desde la Dirección General para llegar al número 0 de accidentes laborales en Castilla-La Mancha”.
Por sectores, en la construcción el índice de siniestralidad ha bajado, porque es menor el número de personas que se dedican a ello en estos momentos, puesto que este es un dato relativo a la población ocupada. En sector servicios, sin embargo, ha subido un poco más sobre todo en relación a los accidentes in itinere mortales, donde se ha experimentado “un poco más de subida, aunque en accidentes mortales en general el número ha bajado un 10%”.
