El equipo dirigido por Juanlu Alonso terminó vencedor en la tanda de penaltis de un partido que concluyó el tiempo reglamentario con empate a cuatro
El fútbol sala castellanomanchego goza de muy buena salud. Prueba de ello fue la trepidante final del Trofeo JCCM que pudimos ver el pasado sábado disputada sobre la pista del Pabellón Virgen de la Cabeza.
Viña Albali Valdepeñas y Manzanares FS Quesos El Hidalgo, dos equipos que militan en Primera División, nos regalaron un auténtico espectáculo, demostrando que esta disciplina es uno de los deportes más apasionantes que existen.
La primera mitad ya dejó muy claras las intenciones de ambos protagonistas. Primero golpeó Manzanares, por medio de Álvaro, superado el ecuador. No obstante, Valdepeñas se rehízo con contundencia y obró la remontada gracias a los tantos de Matheus y Lazarevic. Sin embargo, al filo del descanso, Daniel dibujaba el 2-2.
Tras la reanudación, la tónica fue la misma. Ninguno de los dos equipos rehuía a atacar con contundencia. Fruto de ello llegó el 2-3 por parte de Raúl Campos nada más arrancar el segundo acto. Instantes después, Matheus intervenía nuevamente para instaurar otra vez el empate.
Con el 3-3, Valdepeñas logró ponerse por delante por primera vez en el partido. Solano fue el encargado de cumplir dicha misión en el 39’ de juego.
Sin embargo, Manzanares no había dicho aún su última palabra y cuando parecía que el triunfo tendría color vinatero, Humberto ponía el 4-4 con el que se llegó al final del tiempo reglamentario.
El campeón debía decidirse desde el punto de penalti. En dicha suerte, Manzanares FS estuvo más acertado y acabó cosechando un 1-4 que le daba su tercer Trofeo JCCM.