La Cultura del Vino de la Diputación de Ciudad Real llega a Campo de Criptana con la celebración de una cata dirigida por Raúl Miguel Revilla, jefe de sumilleres del Restaurante Zalacaín (Madrid), y en la que han participado más de 300 personas.
Raúl Miguel Revilla ha conducido una cata maridada donde se han degustados los vinos de Bodegas Castiblanque, Símbolo, Vidal de Saz, Vínculo y Dominio de Baco acompañados de cinco tapas elaboradas por Bar La Plaza ‘Los Díaz’. Una cita con la Cultura del Vino, que tal y como ha explicado el sumiller. “es una idea fantástica. Hoy en día las bodegas tratan de buscar hacer vinos de calidad y posicionarse en el mercado internacional, por lo que La Cultura del Vino es un gran apoyo para los que nos dedicamos al mundo del vino”.
Manifestaciones compartidas por el alcalde criptanense, Santiago Lázaro, quien ha puesto en valor la importancia de promover acciones que contribuyan a posicionar al vino como un alimento de referencia. En esta línea, recordaba que Campo de Criptana cuenta con “excelentes vinos” y con iniciativas como Escuela de Catadores o el AirénFest que permiten promover “de la mejor manera posible la Cultura del Vino”.
Una promoción y una puesta en valor aplaudida por el vicepresidente de la Diputación provincial, Gonzalo Redondo, quien ha recordado que son más de 70 los eventos que se desarrollarán durante los próximos dos meses en 38 municipios de la provincia de Ciudad Real, apostando con ello por el medio rural.
Asimismo, Carmen Olmedo, delegada de la Junta en Ciudad Real, ha asegurado que para “amar el vino hay que conocerlo” y La Cultura del Vino es la mejor herramienta para hacerlo, especialmente “en una tierra que es la despensa de Europa y la primera productora de vino de España”. Además, Olmedo ha recordado el peso que la viticultura tiene en el desarrollo económico y social de los pueblos, lo que contribuye a fijar población.