Una delegación de importados chinos participan estos días en una misión inversa organizada por la Denominación de Origen La Mancha, como parte de la estrategia comercial con el país asiático, tras el interés que los vinos manchegos han despertado entre los consumidores.
Un show room de cata organizado por el Consejo Regulador, en el que han participado cerca de una decena de bodegas manchegas, la visita a algunas de ellas y a los viñedos, en plena campaña de vendimia, y conocer in situ el proceso de producción son algunas de las actividades que los importadores chinos llevarán a cabo durante estos días.
Loli Wei, una de las importadoras participantes en esta iniciativa, en declaraciones a los medios de comunicación ha asegurado que el «se ha reavivado el interés por los vinos de La Mancha, especialmente por los blancos de airén, en un mercado donde predominan los tintos». “Aunque siguen prefiriendo tintos, está creciendo el interés por el vino blanco, y eso es bueno para el airén, que además gusta mucho en China”, explicaba.
Por su parte, Ángel Ortega, gerente del Consejo Regulador, destacó la importancia de China como mercado clave para los vinos manchegos, aunque Loli Wei, una de las importadoras participantes en esta iniciativa. reconoció una ralentización en la demanda tras la pandemia. Sin embargo, en 2023 China fue el cuarto mayor comprador de estos vinos, con 1.222.545 botellas importadas, manteniéndose como el primer mercado en la región asiática.
Esta acción forma parte del programa European Wine Ambassadors (EUWINA), cofinanciado por la Unión Europea y realizado en conjunto con otras regiones vinícolas mediterráneas, como Wines of Greece y la Unión de Vinos DOC y DOCG de Véneto (UVIVE).